Páginas

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Historia


Cuenta el señor Carlos Serna, escritor antioqueño, que en 1947 Alberto Villegas Lopera, un ex presidente de la Liga Antioqueña de fútbol, lideró la fundación de una sociedad comercial destinada a estimular los deportes y establecer el fútbol y el baloncesto profesional en Antioquia. La sociedad inició labores con $50.000 aportados por 500 socios en acciones de $100 pesos cada una, pagaderas en un primer contado de $20 pesos al momento de ingresar a la sociedad y los $80 restantes en un máximo de 12 cuotas mensuales. Así pues, el viernes 7 de marzo de 1947 se comenzó a gestar el nacimiento de la nueva Institución bajo el nombre de Club Atlético Municipal de Medellín, pero por escritura pública la nueva sociedad se constituyó el 30 de abril de 1947 en la notaría primera de Medellín. En 1950 se cambió el nombre por Atlético Nacional y desde allí siempre ha sido el mismo. El origen nacionalista, cuenta Serna en su libro sobre el elenco Verdolaga, viene de la fusión de dos equipos como Unión e Indulana que participaban con ruido en los torneos de la Liga de Fútbol de Antioquia de ese entonces, pero realmente el 30 de abril de 1947 está establecida como la fecha en que se comenzó esta linda historia. 



Era un sueño ambicioso. Se trataba de convertir al Atlético Nacional en un equipo que hiciera honor a su nombre, integrado únicamente por jugadores colombianos. Un cuadro criollo protagonista del torneo colombiano y que poco a poco pudiera avanzar en el afianzamiento de un estilo propio que nos abriera amplios horizontes en el futuro. Hoy, casi setenta años más tarde de su aparición, con el nombre de Atlético Municipal, vemos con satisfacción que buena parte de los objetivos se han cumplido. Setenta años a lo largo de los cuales el equipo verde y blanco de Antioquia se ha consolidado como el verdadero símbolo del fútbol colombiano. Siete décadas llenas de logros y satisfacciones. Catorce estrellas en el torneo de la Dimayor. La primera en el 54 cuando apenas se consolidaba el fútbol nuestro, superada la etapa del Dorado. Y el logro continental de la Copa Libertadores en 1989 como el trofeo más grande de una insuperable historia que además cuenta con la mayor cantidad de adeptos en el país por la popularidad de los colores y la representatividad de las conquistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario